Los petroglifos de A Rega Pequena II y III están localizados en Reibón, en la parroquia de Santa María de Meira. Son dos ejemplos de un conjunto más amplio de estaciones rupestres en el entorno y situados en su respectiva roca, separadas por unos centímetros, y que apenas se levantan del suelo.
Los motivos representados son geométrico-abstractos y parecidos estilísticamente a los de A Rega Pequena I. Por un lado en A Rega Pequena II, fácilmente identificable por las huellas de las cuñas de cantería y donde los motivos cubren prácticamente toda la roca, tenemos representados una compleja combinación de círculos concéntricos, semicírculos, cazoletas y algunos motivos vagamente cuadrangulares unidos por una maraña de sinuosas líneas. Uno de los mayores enemigos de los petroglifos, dejando a un lado los incendios forestales, son los trabajos de cantería que en muchos casos destruyen las estaciones. Otras veces son indultados en el último momento pero dejando, como puede observarse, las marcas de su trabajo.
Por otro lado el motivo representado en A Rega Pequena III es más simple, tres círculos concéntricos con cazoletas centrales unidas por dos líneas que forman un triángulo abierto.