Estas cuencas públicas, dispuestas en el siglo XIX, son alimentadas por la misma fuente que hizo brotar, según la leyenda, el Émilion en el siglo VIII en el Hermitage. Ofreciendo un verdadero espectáculo para todo el pueblo, las lavanderas acudían allí a lavar su ropa o más bien a enjuagarla.
Teléfono fijo : +33 5 57 55 28 28
E-mail : accueil@saint-emilion-tourisme.com
Sitio web (URL) : www.saint-emilion-tourisme.com
Lavadero
Conditions de visite : Visita libre