Pedra da Arca

Conocida también como Casa dos Mouros, es también uno de los monumentos megalíticos de mayor tamaño de Galicia. Conserva aún buena parte del volumen de su túmulo de tierra y la mayor parte del dolmen con su corredor, por lo que falta sólo la losa posterior que cerraría la cámara.

En ésta y en la tapa de cubrición se pueden ver dos cruces grabadas que, en tiempos históricos,  podrían haber desempeñado la función de cruces de término, dado que el dolmen se localiza en el linde entre las parroquias de Baiñas (Vimianzo) y Olveira (Dumbría).

En el interior de la cámara se conservan también restos de grabados y pinturas rojas prehistóricas. El motivo más destacado de los grabados es un diseño localizado igualmente en otros dólmenes del Noroeste como Dombate, Anta de Espiñaredo o, cerca del Duero, Chá de Parada. Fue llamado «The Thing», por la arqueóloga irlandesa Elisabeth Shee y el término se popularizó hasta hoy en día. Existen varias interpretaciones sobre lo que podría significar este símbolo; algunos creen que se trataría de un hacha, pero también se ha apuntado a la representación de un cachalote. En cualquier caso parece claro que era una figura de alto valor simbólico por su frecuente presencia en las cámaras megalíticas de la Península ibérica. En la Pedra da Arca  hay en concreto dos figuras de este tipo que aparecen grabadas junto a líneas onduladas y otros trazos de difícil interpretación.

Un dato interesante es que el dolmen fue construido con tres tipos de rocas diferentes, de las cuales dos se hallan presentes en el entorno inmediato. Curiosamente la piedra en la que aparecen los grabados, de granodiorita, tuvo que ser transportada desde tres kilómetros de distancia.