Nos encontramos en este tramo del camino siguiendo la traza del histórico camino real que iba de Santiago y A Coruña a Ferrol, pasando por Betanzos. Acabamos de bajar la cuesta de O Viadeiro, que en algunos relatos aparece tildada como penosa de bajar, es decir, mala. Aquí hubo, en 1809, duros combates entre las tropas napoleónicas y los guerrilleros gallegos.
En el último tramo de bajada y antes de llegar a las primeras casas, se puede ver a la derecha de la carretera actual los restos del viejo camino real que subía hacia O Viadeiro. Es un camino profundo y estrecho, como una trinchera. En la memoria oral local se habla de que en esta cuesta aprovechaban los ladrones para asaltar los carruajes que, por aquí, subían muy lentamente.
Ahora vamos a cruzar el puente sobre el río Baxoi. El puente es uno de los varios que mandó construir Fernán Pérez de Andrade “o Bo”, señor de estas tierras, a finales del siglo XIV. Cuando dejemos el ayuntamiento de Miño, lo haremos por otro puente, el de Lambre, también de la misma época y con el mismo mecenazgo.