Tras una segunda barrera (ciérrela), el camino desembocará en una carretera que pasa por al lado de la hermosa mansión de Etxetoa (dintel tallado). Suba por el asfalto hacia la izquierda para entrar al barrio de Gréciette. Después de un caserío, un camino toma el relevo de la carretera. En la parte superior, un tramo asfaltado le llevará de nuevo hasta el cruce de la captación de agua y el poste eléctrico. Un último esfuerzo por las callejuelas y enseguida llegará a la iglesia.