La Dune

Las Landas Atlánticas del Sur cuentan con 30 km de playas de arena fina y, del mismo modo, no menos de kilómetros de dunas.
Móviles en esencia, las dunas litorales son modeladas naturalmente por la arena, el viento y las plantas. Hoy en día, el cinturón dunar está ampliamente protegido, en particular por la Office National des Forêts. De hecho, la gestión de la ONF, con el objetivo de preservar la biodiversidad, utiliza un método de gestión que aprovecha los procesos naturales (viento, dinámica vegetal, etc.) para atrapar la arena.
La duna es un medio natural frágil y es nuestro último bastión frente a los fenómenos de erosión costera y sumersión marina.
Por eso la mimamos, la admiramos, la cuidamos y, sobre todo, la respetamos.