Representando el estilo clásico, la fachada principal tiene un orden colosal dórico (orden arquitectónico que reina en varios niveles), rematado por un entablamento (banda que corona una fachada) y un frontón. La capilla alberga en su coro un magnífico retablo realizado en 1609 y un sagrario de marquetería. Pinturas decoran la bóveda del coro y su entrada. La sacristía está dotada de mobiliario donde se guardan los vasos sagrados, los ornamentos sacerdotales, los objetos necesarios para el culto, los registros y donde los celebrantes y el clero se ponen y se quitan las vestiduras y los ornamentos litúrgicos. Está decorada con un notable conjunto de ebanistería tallada, cargada de monogramas religiosos y emblemas monárquicos. La capilla Saint-Louis acoge regularmente exposiciones que muestran su belleza.
Capilla
Conditions de visite : Visita libre