Fábrica de Harinas San Isidro Labrador

Edificio construido en 1926, relacionado con la agricultura del municipio, esta compuesto de diferentes estructuras en forma de U en torno a un gran patio abierto a la calle, en frente del cuál se sitúa el acceso. Se distribuye en tres áreas; una central dónde se situaría la fábrica propiamente dicha y dos áreas laterales destinadas a almacenaje (la de la derecha para la harina, el  producto ya elaborado, y la de la izquierda para el grano, la materia prima). El edificio tiene un subterráneo conformado por un sistema de vigas de madera y vigas entrecruzadas, dónde  se ubicaba la maquinaria eléctrica, cuya correa de transmisión movía todas las máquinas de la fábrica.

Una gran escalera de madera discurre adosada a la fachada principal y comunica con el piso superior. La cubierta es a dos aguas, de correas de madera con entrevigado de cañizo revestido de yeso, sobre el que asienta el revestimiento de teja y cuatro cuchillos españoles de madera.

En el primer piso estaban la máquinas, por una parte, con las funciones de limpiar, separar y satinar (prensar) el grano, y por otra, las de cernir (pasar el grano seco por un tamiz), triturar y comprimir. En la planta baja se situaban máquinas de madera como la deschinadora (separaba el grano según su tamaño), la despuntadora (cortado del grano), los cepillos o los molinos de cilindros.

En el exterior, la fachada se caracteriza por un pequeño retablo de azulejería con la imagen de San Isidro Labrador.