El establecimiento de la nobleza sueca se estima que ocurrió en 1280. En esa época, se promulgó el Decreto de Alsnö que regulaba los llamados impuestos por privilegios nobles por primera vez. Los nobles medievales proporcionaban tropas al Rey con lo que estaban eximidos de pagar impuestos. Esta sería la base de lo que se conoció más tarde como la nobleza. La nobleza tenía una influencia significativa en Suecia hasta 1866, cuando un parlamento bicameral sustituyó a la anterior legislatura de cuatro estados. La era del imperio sueco durante el siglo XVII y la Era de la Libertad, en el XVIII, supusieron el apogeo político de la nobleza.Durante la coronación de Erico XIV de Suecia en 1561, fueron nombrados por primera vez en Suecia condes y barones. Este hecho dividió a la nobleza en tres clases. Durante la coronación de Juan III de Suecia en 1569 se promulgaron los privilegios nobles. De acuerdo con estos privilegios, una persona era noble al nacer en una familia noble o al recibir la nobleza por parte del rey.
El rey Gustavo Adolfo de Suecia, de la Orden de la nobleza desde 1626, participó en la estructuración de la nobleza en una institución recién creada, la Casa de la Nobleza. La nobleza era, como primer nivel debajo del monarca, parte de un gobierno de cuatro cámaras que comprendían la nobleza, el clero, los burgueses y los campesinos.
Durante sus sesiones parlamentarias individuales en la Casa de la Nobleza, la nobleza estaba encabezada por el Lantmarskalk. A lo largo de los siguientes 240 años, se convirtió en una figura particularmente poderosa de la política sueca.
En 1719, el poder político pasó de la alta nobleza a la baja nobleza, que tenía una amplia mayoría en la Casa de la Nobleza.El rey Gustavo III, en la revolución sin derramamiento de sangre de Suecia de 1772, devolvió el poder político al rey.
Tras la revolución de 1809, la nobleza recuperó el poder parcialmente tras las políticas de Gustavo III de Suecia.
En 1865, el sistema parlamentario fue adoptado con dos cámaras que representaban los cuatro estados. A partir de ese momento, la nobleza ya no era capaz de jugar un papel político determinante.
La capacidad del monarca para ennoblecer fue revocada en 1975. Desde 2003, la Casa de la Nobleza es una organización privada. La Casa de la Nobleza se rige actualmente por una asamblea de la nobleza que se reúne cada tres años. Sus acciones son llevadas a cabo por una secretaría dirigida por un funcionario con el título de secretario de la Casa de la Nobleza.