Olveiroa

Punto destacado de parada de los peregrinos y cruce de caminos, es una pequeña aldea con poco más de 100 habitantes que ha sabido resurgir de sus cenizas gracias al Camino. Las casitas que pueblan su estructura medieval han sido restauradas y en algunos casos convertidas en albergues, sus pequeñas callejuelas, antaño poco más que corredoiras, están impolutas y despejadas. Aldea volcada con los peregrinos, viviendo por y para ellos.


RECOMENDACIÓN FOTOGRÁFICA

Es un verdadero placer fotográfico pasear por Olveiroa, cualquier rincón invita a ser capturado por nuestra cámara, desde que entras en este pequeño pueblo no pararás en llevar tu ojo a la pantalla de tu cámara para disparar a cada paso.

Las calles, sus gentes, el colorido y detalle de reconstrucciones con ambiente familiar, todo nos invita a componer, horizontal, vertical, oblicuo, comenzamos a ver estructuras, cruces de perspectiva, diagonales, y de repente un animal doméstico observándonos entre unas piedras, alguien mirando a través de una ventana, o el paso de un peregrino al límite de sus fuerzas.

También el intrincado de sus calles invita a la luz a reflejarse al caer la tarde y se difumina entre paredes ocre creando una iluminación perfecta para el retrato.

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