Nada mejor que avanzar bajo Les Aiguilles d'Ansabère, donde convergen el mundo pastoril y la alta montaña. La dificultad de esta ruta de envergadura reside en la distancia y en el pedregoso final duro y resbaladizo. ¡Pero qué espectáculo!
Desde el parking de Masousa, el camino empieza en la pista en 2,4 km. Cruce el arroyo de Ansabère por el puente Lamary y siga subiendo por una pista de hierba. La pendiente se intensifica y se hace pedregosa. Tras un breve pasaje bajo los árboles, desemboca en la meseta. Gire a la izquierda (suroeste) y cruce la llanura.
Siga el sendero que sube haciendo zigzag y penetra en el hayal. El sendero se ensancha y, tras un tramo por la derecha y otro en "S", desemboca fuera del bosque. Acercándose a las cabañas, el camino pasa a la derecha. Sin embargo, es posible pasar por ellas para tomar algo de agua o de queso.
El trazado de bajada es idéntico a la subida. Atención en la salida, hay pendiente y el suelo es inestable.
A la salida del bosque aparecen los picos bajo las más bellas siluetas (2271 m y la punta 2377 m). A la izquierda se encuentra el Col de Pétragème (2090 m).
Es posible comprar un poco de queso en la cabaña ocupada por el pastor. Estos quesos son elaborados y salados allí mismo.
El pico de Midi d'Ossau (2884) muestra su singular forma al llegar al collado.
Amarillo
Trait
Ida-vuelta
Agua punto
Natural