Muy poco queda en pie de esta propiedad que perteneció a una de las grandes familias de la nobleza gallega, los Soutomaior. No obstante, su presencia aunque en ruinas confirma al entorno de Nigrán como un lugar de especial atractivo para el asentamiento de los 'VIP' gallegos del siglo XVI, en su mayoría relacionados con la Iglesia o el mundo militar.
De este pazo se conserva una parte de la capilla, elemento que se repite en la mayoría de las casas señoriales de la época, en la que se conservan las hornacinas y el arco de medio punto. El escudo de armas de esta casa está actualmente en el Museo de Castrelos de Vigo.